El hundimiento del ferry fue uno de los mayores desastres en Corea del Sur y causó indignación y pesar nacional porque la mayoría de las víctimas fueron escolares que se encontraban en un viaje de excursión.
Según la agencia de noticias Yonhap, la fiscalía también demandó cadena perpetua para tres miembros de la tripulación bajo los cargos de negligencia y falla en proteger a los pasajeros durante el hundimiento.
La Corte no respondió de inmediato ante la petición de la fiscalía que busca la pena de muerte para el capitán Lee Joon-Seok, quien en repetidas oportunidades ha pedido disculpas a los familiares de las víctimas y argumenta que nunca pensó que su acción podría desencadenar la muerte masiva de los estudiantes.
Las autoridades citan sobrecarga, almacenamiento inapropiado, esfuerzos para el rescate fuera de tiempo y negligencia como algunas de las acusaciones que dejó 304 muertos.
