El presidente Barack Obama ofreció su última conferencia del año en la Casa Blanca en la que resaltó los logros alcanzados como gobierno en 2015, pero al mismo tiempo dijo, que aún le queda mucho por hacer.
"En 2016 voy a dejar todo en el campo", agregó.
Durante la conferencia, elogió el trabajo del Congreso para lograr la aprobación bipartidista del presupuesto para el año fiscal 2016, así como una serie de victorias legislativas, como la modificación de la ley de educación "Que ningún niño se quede atrás".
Del mismo modo aseguró que en 2015 se produjeron una serie de avances significativos en su agenda, como el inicio de los acuerdos diplomáticos con Irán y Cuba y la aprobación del acuerdo comercial Transpacífico.
Sobre la latente amenaza terrorista, el presidente Obama instó a seguir trabajando unidos para vencer a estos grupos extremistas que solo buscan crear terror en nuestras comunidades.
Igualmente Obama reiteró su convencimiento de que el presidente de Siria, Bashar Al Asad debe dejar el cargo para que se acabe la guerra civil en el país y con ello amilanar el peligro que representan los yihadistas.
Mientras Al Asad continúe en el poder EE.UU. seguirá siendo un objetivo del terrorismo yihadista, afirmó Obama.
"No decir nada ante un líder autoritario que mata a sus propios ciudadanos es contrario a los que somos y a nuestros intereses, en este punto. Eso nos haría más un objetivo.
Asad se va a tener que ir para que cese la sangría en el país y todas las partes continúen hacia adelante por un camino no sectario. Él perdió la legitimidad a los ojos de la mayoría del país", añadió el mandatario estadounidense", agregó. el mandatario.
Asimismo aplaudió el fallo de la Corte Suprema sobre la legalidad de los matrimonios del mismo sexo y el inicio de una profunda reestructuración del sistema de justicia, en el cual se consideren penas más justas y mejores condiciones penitenciarias.
