Una apologética Kathy Griffin usó Instagram para emitir un mea culpa por participar en un sesión de fotos en la que se la ve sosteniendo una cabeza ensangrentada que se parece al presidente Donald Trump.
“Soy una cómica”, dijo. “Crucé la línea. Llegué a la línea, después la crucé. Fui muy lejos. La imagen es demasiado perturbadora. Entiendo que ofende a la gente. No fue divertido. Lo entiendo”.
Dijo que pidió al fotógrafo de celebridades Tyler Shields que elimine la foto.
“Les ruego su perdón. Fui muy lejos”, dijo Griffin en un mensaje el martes. “Cometí un error y estuve equivocada”.
El martes, Shields, quien es famoso por sus provocativas imagenes, publicó todos que tomó a Griffin las que inmediatamente fueron fuertemente criticadas en Twitter.
El propio presidente dijo en Twitter “Kathy Griffin debería estar avergonzada de ella misma. Mis hijos, especialmente Barron, mi hijo de 11 años, están teniendo un difícil momento con esto. Morboso”.
El hijo del presidente, Donald Trump Jr., calificó la imagen como “asquerosa pero no sorprendente”.
Chelsea Clinton, hija de la ex rival de Trump Hillary Clinton, calificó la foto como “vil y mala”. “Nunca es divertido hacer bromas sobre asesinar al presidente”, escribió en Twitter Chelsea Clinton.
