Un ejecutivo del fabricante informático estadounidense, Apple fue acusado de vender secretos industriales a proveedores asiáticos.
Paul Shin Devine, ejecutivo de la dirección de compras del grupo, recibió más de un millón de dólares desde 2006 de parte de seis industriales chinos, surcoreanos y singapurenses.
Según documentos citados por el Wall Street Journal, Devine pedía sobornos para ser depositados en sumas pequeñas en cuentas extranjeras a nombre de su esposa.
Antes de denunciarlo a las autoridades, Apple sospechaba de Devine debido a correos electrónicos que el ejecutivo enviaba desde su computadora portátil.