Estados Unidos y el Reino Unido iniciaron conversaciones preliminares el lunes en Washington sobre un acuerdo de comercio que establecerá una nueva relación comercial entre los países, después del Brexit, la salida de los británicos de la Unión Europea.
El Reino Unido tiene la esperanza de que remover las barreras bajo su actual acuerdo con la Unión Europea impulse el comercio con Estados Unidos en 40.000 millones de dólares para 2030.
Nadie espera que sean negociaciones fáciles, pero funcionarios británicos de comercio dicen que están confiados en que tienen el apoyo del liderazgo estadounidense, incluyendo el Congreso, pero especialmente el presidente Donald Trump.
El presidente estadounidense, Donald Trump, hablando al margen de la cumbre del G-20 en Hamburgo, Alemania, anteriormente este mes, dijo que quería avanzar “muy, muy rápido” en un acuerdo de comercio con Gran Bretaña.
Gran Bretaña está ubicada para asegurarse un lugar en primera línea en las negociaciones comerciales con Estados Unidos, más de un año después que el entonces presidente Barack Obama advirtiera a Londres sobre las futuras relaciones comerciales si votaban a favor de salirse de la Unión Europea.
