El Vaticano ha advertido a un arzobispo católico retirado, en Paraguay, que ponga fin a sus planes de presentarse a la presidencia de la nación sudamericana.
En una reciente nota, autoridades eclesiásticas dijeron a Fernando Lugo que la actividad política es incompatible con sus deberes religiosos.
El lunes, Lugo informó que había renunciado al clero y que planea presentarse para las elecciones de 2008.
Lugo ha prometido encabezar una coalición de oposición que desafiará al gobierno del Partido Colorado, que ya lleva cinco décadas en el poder.
Recientes encuestas de opinión pública muestran que el exobispo de San Pedro está a la cabeza de otros candidatos en la contienda presidencial.
El presidente de Paraguay, Nicanor Duarte, está ejerciendo presión para que se apruebe una reforma constitucional que elimine la prohibición a la reelección antes de los comicios de 2008.