Un grupo militante iraquí se atribuyó responsabilidad por el asesinato del vicegobernador de Bagdad.
Horas después de cometido el crimen, el ejército militante de Ansar al-Sunna dijo que perpetró el ataque.
El grupo también advirtió que atacará a quienquiera que coopere con el gobierno iraquí o sus aliados.
Entretanto, el presidente iraquí Ghazi al-Yawar criticó los planes de la coalición de atacar insurgentes en el bastión rebelde de Falluyah.
Los comentarios de al-Yawar contradicen los del Primer Ministro Iyad Allawi, quien advirtió a la ciudad el domingo que entregara a los militantes extranjeros o enfrentaría un ataque de gran escala.
El presidente iraquí dijo que los negociadores deberían continuar dialogando con los líderes de Falluyah hasta que las fuerzas estadounidenses reunidas en las afueras de la ciudad sean reemplazadas por tropas iraquíes.
Cuando eso suceda, dijo, los iraquíes dejarán de apoyar a la insurgencia.