Indonesia extendió la detención de cuatro estudiantes musulmanes deportados de Paquistán por sospechas de estar vinculados a un líder terrorista.
La policía acusó a los cuatro de haber ayudado a Hambali, el sospechado líder del grupo terrorista Jemaah Islamiyah, que tiene vínculos con al-Qaeda y ha sido culpado de las explosiones del año pasado que mataron a 202 personas en clubes nocturnos de Bali.
Las autoridades acusan a los cuatro estudiantes, incluyendo a un hermano menor de Hambali, de haber canalizado fondos al sospechoso líder terrorista para llevar a cabo ataques en Indonesia.