El gobierno de Colombia y la guerrilla de las FARC sellaron en una emotiva ceremonia el fin de la guerra colombiana que se extendió por 52 años.
“Lo que firmamos hoy es algo más que un acuerdo entre un gobierno y una guerrilla, es una declaración del pueblo colombiano para el mundo para decirles que nos cansamos de la guerra. ¡No más la guerra!”, dijo el presidente Juan Manuel Santos ante los vítores del público que coreó “¡No más guerra! ¡No más guerra!”
Antes había sido precedido en la palabra por el máximo jefe guerrillero, Rodrigo Londoño Echeverry, quien también resaltó la importancia del acuerdo.
“En nombre de las FARC-EP ofrezco sinceramente perdón a todas las victimas del conflicto, por todo el dolor que hayamos podido causar en esta guerra", dijo el ex jefe guerrillero.
"¡Qué dios bendiga a Colombia! ¡Se acabó la guerra”, agregó Londoño al momento en que aviones de la Fuerza Aérea Colombiana surcaron el cielo de Cartagena.
“Esta vez vinieron a saludar la paz y no a descargar bombas”, reconoció riendo Londoño.
El ofrecimiento de perdón fue recibido por Santos con el compromiso de defender el derecho de todos los colombianos —y de la ex guerrilla— al disenso.
“No más guerra… No más intolerancia, no más la violencia que sembró atraso", dijo el mandatario.
"Este es el clamor de Colombia y esta es la decisión de Colombia”.
El acuerdo firmado tendrá que ser refrendado el próximo domingo en un referendo en el que los que están de acuerdo parecen por ahora llevar las mejores posibilidades de ganar. La amenaza más grande parece ser más bien el abstencionismo.
A los que todavía no lo aceptan, Santos les recordó que es preferible “un acuerdo imperfecto que salve vidas a una guerra perfecta” que continúe con la matanza.
“Colombianos cese la horrible noche”, terminó diciendo Santos en su discurso.
