Arqueólogos estadounidenses creen haber encontrado en el fondo del mar, frente a la costa norte de Haití, los restos de la carabela Santa María, una de las tres en las que Cristóbal Colón atravesó el Atlántico para descubrir las Américas en1492.
La información fue ofrecida en primicia al diario británico The Independent por el estadounidense Barry Clifford, arqueólogo submarino quien ha estado al frente de las exploraciones.
Otras expediciones llevadas a cabo en esa zona del Caribe en 2003 indicaban que los restos del naufragio podrían estar en ese lugar, y ahora, según Clifford, "toda la topografía submarina y la evidencia arqueológica sugieren que estos restos son del famoso buque insignia de Colón”.
Varias semanas después de que el almirante tocó tierra en las Américas, el barco encalló al norte de Haití y la embarcación fue abandonada.
Según el arqueólogo, el gobierno haitiano ha cooperado extensamente en la búsqueda y lo que se impone ahora es “llevar a cabo una detallada excavación arqueológica de los restos del naufragio".
Durante años se cotejó lo escrito por Colón en su diario y se estudió la topografía marina y las corrientes para determinar con la mayor precisión posible donde podrían hallarse los restos de la carabela.
Clifford dijo que recientes inmersiones hechas por los investigadores en el sitio a principios de este mes, han permitido identificar el pecio como supuestamente la Santa María.
Sin embargo, algunos de los objetos claves que habrían permitido reconocerlo fácilmente al parecer han sido saqueados por buscadores de tesoros.
Lo que llevó al arqueólogo a pensar que se trataba del barco fue un cañón con diseño característico del siglo XV que fue hallado en el lugar.
De confirmarse que es la Santa María, Clifford dijo que si el trabajo arqueológico se hace como corresponde y la madera está bien conservada, los restos del barco podrían ser exhibidos en un museo en Haití.
La información fue ofrecida en primicia al diario británico The Independent por el estadounidense Barry Clifford, arqueólogo submarino quien ha estado al frente de las exploraciones.
Otras expediciones llevadas a cabo en esa zona del Caribe en 2003 indicaban que los restos del naufragio podrían estar en ese lugar, y ahora, según Clifford, "toda la topografía submarina y la evidencia arqueológica sugieren que estos restos son del famoso buque insignia de Colón”.
Varias semanas después de que el almirante tocó tierra en las Américas, el barco encalló al norte de Haití y la embarcación fue abandonada.
Según el arqueólogo, el gobierno haitiano ha cooperado extensamente en la búsqueda y lo que se impone ahora es “llevar a cabo una detallada excavación arqueológica de los restos del naufragio".
Durante años se cotejó lo escrito por Colón en su diario y se estudió la topografía marina y las corrientes para determinar con la mayor precisión posible donde podrían hallarse los restos de la carabela.
Clifford dijo que recientes inmersiones hechas por los investigadores en el sitio a principios de este mes, han permitido identificar el pecio como supuestamente la Santa María.
Sin embargo, algunos de los objetos claves que habrían permitido reconocerlo fácilmente al parecer han sido saqueados por buscadores de tesoros.
Lo que llevó al arqueólogo a pensar que se trataba del barco fue un cañón con diseño característico del siglo XV que fue hallado en el lugar.
De confirmarse que es la Santa María, Clifford dijo que si el trabajo arqueológico se hace como corresponde y la madera está bien conservada, los restos del barco podrían ser exhibidos en un museo en Haití.
