El senador republicano por el estado de Kentucky, Rand Paul, dio la respuesta del Tea Party al discurso del presidente Barack Obama, poco después que hiciera lo propio el senador Marco Rubio.
Hablando desde el Club de Prensa Nacional en Washington, Paul dijo que su partido es el “que abraza el trabajo duro y el ingenio, y por lo tanto debemos ser el partido que abraza a los inmigrantes que quieren venir a Estados Unidos por un futuro mejor”.
Sobre la economía, Paul dijo que “ambos partidos son culpables de gastar demasiado, de proteger vacas sagradas, de arreglos tras bambalinas en los que todos ganan, pero en los que pierden los contribuyentes”.
Agregó que “el secuestro”, el término usado para los fondos retenidos si no se controla el déficit, “debe mantenerse” y que muchos piensan que en realidad debería ser de al menos $ 4 billones de dólares para “evitar otra rebaja en la calificación del crédito de Estados Unidos”.
El senador se quejó de que “Washington actúa en una manera en que su familia nunca podría —gastan dinero que no tienen, prestan a nombre de las generaciones futuras, y se echan la culpa unos a otros por no arreglar el problema”.
“Si el Congreso se rehusa a obedecer sus propias leyes, si el Congreso se rehusa a aprobar un presupuesto, si el Congreso se niega a leer sus leyes, entonces yo digo: Barramos el lugar. Limitemos los períodos y mandémoslos a sus casas”, terminó.
Hablando desde el Club de Prensa Nacional en Washington, Paul dijo que su partido es el “que abraza el trabajo duro y el ingenio, y por lo tanto debemos ser el partido que abraza a los inmigrantes que quieren venir a Estados Unidos por un futuro mejor”.
Sobre la economía, Paul dijo que “ambos partidos son culpables de gastar demasiado, de proteger vacas sagradas, de arreglos tras bambalinas en los que todos ganan, pero en los que pierden los contribuyentes”.
Agregó que “el secuestro”, el término usado para los fondos retenidos si no se controla el déficit, “debe mantenerse” y que muchos piensan que en realidad debería ser de al menos $ 4 billones de dólares para “evitar otra rebaja en la calificación del crédito de Estados Unidos”.
El senador se quejó de que “Washington actúa en una manera en que su familia nunca podría —gastan dinero que no tienen, prestan a nombre de las generaciones futuras, y se echan la culpa unos a otros por no arreglar el problema”.
“Si el Congreso se rehusa a obedecer sus propias leyes, si el Congreso se rehusa a aprobar un presupuesto, si el Congreso se niega a leer sus leyes, entonces yo digo: Barramos el lugar. Limitemos los períodos y mandémoslos a sus casas”, terminó.
