Luego del terremoto que azotó a Honduras el pasado 28 de mayo, el país se prepara para recibir a los mandatarios de la región en la Asamblea General de la Organización de Estados Americanos.
El secretario general adjunto de la OEA, Albert Ramdin, dijo ante un grupo de periodistas, en San Pedro Sula, que apoyaría al gobierno hondureño en lo que fuese necesario para que el país vuelva a la normalidad.
Ramdin fue el primer funcionario de la OEA en viajar a Honduras, debido a que la ciudad de San Pedro Sula se prepara para celebrar el Trigésimo Noveno Período Ordinario de sesiones de la Asamblea General, el 2 y 3 de junio.
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Según el funcionario el gobierno de Honduras ha realizado un excelente trabajo tanto para abordar las preocupaciones del pueblo hondureño luego del sismo, como para continuar sin anormalidades con la organización del evento regional.
“Estoy convencido de que el país anfitrión está plenamente preparado para avanzar con esta importante Asamblea General”, dijo Ramdin, y agregó que “la ciudad de San Pedro Sula está lista para recibir a los delegados que asistirán a la Asamblea General”.
Los 34 estados miembros de la OEA estarán representados en la reunión del máximo órgano de la organización hemisférica.
Hasta la fecha más de 950 delegados y 264 miembros de medios de comunicación, provenientes de más de 70 países, se han acreditado para asistir a la Asamblea General.