En unas elecciones que se perciben muy cerradas, el pueblo venezolano se lanza a las calles para decidir si apoya al presidente Hugo Chávez en la enmienda constitucional, o no.
La modificación a la Constitución venezolana permitiría que Chávez se presente por cuarta vez consecutiva como candidato a la presidencia en el 2012 y durante todas las elecciones venideras.
El gobernante venezolano ironizó en un discurso público previo a las elecciones, que si Franklin Roosevelt fue reelegido cuatro veces como presidente de Estados Unidos, en Venezuela, él también puede lograr la misma hazaña.
"Sólo que aquí en Venezuela, eso es dictadura", dijo el mandatario.
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La Constitución vigente venezolana restringe la reelección inmediata por un período adicional,
Belkis Ramírez, es una vendedora ambulante que está dispuesta a dar el Sí al presidente venezolano una vez más.
"Nunca tuvimos un presidente que se preocupara y que hiciera tanto por nosotros los pobres. Con Chávez voy a estar hasta la muerte", dijo Ramírez, a la agencia de noticias Associated Press (AP).
Otro comerciante, Oswaldo Torres, piensa dejar de apoyar a Chávez por primera vez.
"Mi voto ha sido para Chávez todos estos años, pero ya está bueno. Creo que Chávez debe ir buscando un sucesor por el bien de la república", comentó Torres, a la AP.
Los adversarios del gobernante venezolano rechazan la enmienda alegando que la reelección indefinida daña el sistema democrático de la nación.
El mandatario por el contrario opina que si la oposición se hace del poder, Venezuela podría sucumbir en un estado de violencia civil muy peligrosa.
"Si la oposición llega al poder, habrá una guerra; por eso es necesario garantizar la continuidad del proceso revolucionario democrático bolivariano y ahí está la propuesta de la enmienda constitucional", dijo Chávez.
El padrón electoral consta de 16,5 millones de votantes quienes son los que decidirán el futuro del presidente Chávez, en medio de un país totalmente dividido.