Un alto funcionario militar estadounidense dice que es improbable que Estados Unidos intente derribar, este miércoles, un satélite espía norteamericano que está cayendo.
La fuente, que habló con la prensa a condición de anonimato, dijo que las altas olas del Océano Pacífico, al oeste de Hawaii, probablemente impedirán que un navío de la Armada cumpla con las condiciones para lanzar el misil.
El militar afirmó que el paso del satélite proporcionará una oportunidad ideal para el derribamiento, cada día, hasta el 29 de febrero.
El Pentágono informó que el satélite transporta combustible tóxico que podría significar una amenaza a la salud pública, si llega a tierra.
Entre tanto, el transbordador espacial Atlantis aterrizó a salvo, este miércoles, tras una misión de dos semanas para expandir la Estación Espacial Internacional.