La policía dice que cree que un solo hombre es responsable por la muerte de cuatro personas, en dos tiroteos en instalaciones religiosas del estado de Colorado, en el oeste de Estados Unidos.
Investigadores dijeron, el lunes, que Matthew Murray mató a tiros a dos personas, en un centro de entrenamiento de misioneros, en Arvada, poco después de la medianoche del domingo.
Unas 12 horas después, y a 100 kilómetros de distancia, Murray mató a dos muchachas adolescentes que salían de una iglesia, en Colorado Springs. Otras cinco personas resultaron heridas en los dos incidentes.
Un guardia de seguridad armado, en la iglesia New Life, mató a Murray.
Según la policía, la mochila de Murray contenía más de 100 municiones.
Líderes de la iglesia dijeron que el guardia de seguridad impidió una mayor pérdida de vidas.
La policía indicó que Murray había sido parte del programa juvenil “Youth with a mission”, en Arvada, hace varios años, pero que había sido expulsado de la escuela por razones desconocidas.