Autoridades iraquíes informan que varias mezquitas sunitas fueron atacadas hoy, jueves, un día después que presuntos militantes de al-Qaeda lanzaron bombas contra el sagrado templo chiíta de Askariya en Samarra.
Los ataques a mezquitas sunitas son una aparente represalia por el ataque del miércoles al templo Askariya de Samarra.
El primer minstro, Nouri al-Maliki, aumentó la seguridad en los sitios religiosos en todo el país tras el ataque en Samarra.
Funcionarios iraquíes han impuesto un toque de queda en Bagdad y Samarra.
A pesar del toque de queda, cientos de iraquíes salieron a las calles del Ciudad Sadr, el barrio chiíta de Bagdad, para protestar por el ataque en Samarra.
También hubo manifestaciones en Najaf y Basora.
En otros acontecimientos, fuentes militares de Estados Unidos dijeron que sus tropas detuvieron a 25 presuntos terroristas en incursiones desde el miércoles.
Agregan que algunos de los detenidos tendrían estrechos vínculos con el líder de al-Qaeda en Irak.