Funcionarios rusos recortaron la misión extravehicular de la Estación Espacial Internacional a causa de un problema con el traje de un cosmonauta.
Alexander Kaleri terminó su trabajo fuera del orbitador varias horas antes, después de haber reportado acumulación de humedad en su casco.
El cosmonauta y los controladores en Tierra ubicaron el problema en una falla de la unidad del sistema de enfriamiento del traje espacial.
Kaleri y el astronauta estadounidense, Michael Foale, completaron la mitad de la caminata espacial de cinco horas y media, cuando informaron del problema.
En otro acontecimiento, problemas técnicos obligaron a científicos europeos demorar de nuevo el lanzamiento de una sonda espacial que tiene programado descender por primera vez en un cometa.