La Autoridad de Antiguedades de Israel determinó que la inscripción de una antigua urna vinculada a Jesús resultó falsa.
El anunció hecho este miécoles en Jerusalén siguió a una exaustiva investigación realizada por un panel de expertos.
Según las autoridades, la urna en sí es auténtica, pero no poco común. Los judíos la utilizaron durante la era de Jesucristo para guardar restos de los fallecidos.
Pero la inscripción grabada en arameo, el idioma que hablaba Jesús, el cual dice: Santiago, Hijo de Joseph, hermano de Jesús” fue grabada mucho después.
La inscripción entusiasmó a los arqueólogos cuando fue puesta en venta, el año pasado, por un israelí.
Oded Golan dijo haber comprado la antigua urna por unos 200 dólares en una tienda de antiguedades en la vieja ciudad de Jerusalén, pero que no recuerda exactamente cual fue la tienda.
La policía israelí investiga a Golan bajo el supuesto cargo de intento de fraude.
Si Golan lo hubiera pasado como un artefacto arqueológico real, su valor habría sobrepasado el millón de dólares.