La Casa Blanca anunciará hoy un programa para suavizar las restricciones a la tala de bosques con el fin de reducir el riesgo de propagación de incendios forestales.
Un verano más caluroso de lo común y una severa sequía son factores que han contribuido a la propagación de incendios forestales en los que se perdieron dos millones y medio de hectáreas.
El programa de Bush podría facilitar la tala a las empresas madereras para reducir la densidad de las regiones boscosas con la esperanza de que se produzcan menos incendios.
Varios ambientalistas argumentan que Bush se está aprovechando de la tragedia causada por los incendios del verano como excusa para permitir una mayor tala comercial de tierras públicas.