El presidente conservador de Polonia, Andrzej Duda, prometió el lunes proteger los valores tradicionales polacos contra los derechos LGBT después de una elección presidencial de primera vuelta que le dio la mayor cantidad de votos pero lo obligó a una segunda ronda.
El regreso inmediato de Duda a un tema que ha planteado con frecuencia durante su campaña fue una indicación de que se dirigía a una segunda vuelta con el alcalde centrista de Varsovia al tratar de ganar los votos de la extrema derecha, más no del centro político.
Los resultados casi completos de la votación del domingo muestran que Duda, que cuenta con el respaldo del partido populista Ley y Justicia, ganó casi el 44% de los votos.
En segundo lugar estaba Rafal Trzaskowski, el alcalde pro-Unión Europea, con poco más del 30%.
Los dos se enfrentarán en una segunda vuelta el 12 de julio, que se perfila como un enfrentamiento de suspenso entre dos políticos de 48 años que representan lados opuestos de una amarga división cultural.
Si Duda gana o no, determinará si Ley y Justicia mantendrá su casi monopolio del poder. En los últimos cinco años, el partido ha tomado el control del sistema judicial del país de una manera que la UE ha denunciado como una violación de los valores democráticos.
La Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa, que supervisó las elecciones, dijo que se llevó a cabo profesionalmente. Pero también dijo que la emisora de televisión pública "se convirtió en una herramienta de campaña para el titular, mientras que algunos informes tenían claros matices xenófobos y antisemitas".
"La campaña en sí se caracterizó por una retórica negativa de los principales candidatos que agravó aún más la atmósfera de confrontación", dijo la OSCE en un comunicado. "El lenguaje inflamatorio del titular y su campaña fue a veces xenófobo y homofóbico".
Mientras Trzaskowski seguía a Duda el domingo, en una segunda vuelta probablemente ganaría muchos votantes de los otros nueve candidatos que ahora han sido eliminados, incluido un progresista independiente católico, Szymon Holownia, que ganó casi el 14%.
También estará en juego el casi 7% de los votos que recibió un candidato de extrema derecha, Krzysztof Bosak.
En la radio estatal el lunes por la mañana, Duda enfatizó cómo sus valores se alinean con los de Bosak, llamando al matrimonio entre personas del mismo sexo "extraterrestres" y describiendo a Trzaskowski como "izquierdista".
A principios de este mes, Duda dijo que el movimiento de derechos LGBT promueve un punto de vista más peligroso que el comunismo. A pesar de las protestas callejeras en Polonia y las críticas de la UE, Duda parecía estar volviendo a ese tema, aunque con un lenguaje ligeramente atenuado.
Dijo que los "materiales ideológicos" deben mantenerse fuera de las escuelas y que cualquier material pro-LGBT en la escuela le recordaría su infancia, cuando el régimen comunista les enseñó a los niños una ideología y los niños aprendieron algo más en sus hogares.
El programa de Trzaskowski exige permitir las asociaciones civiles entre personas del mismo sexo pero no el matrimonio, y ha evitado en gran medida el tema en la campaña electoral.
Él también ha tratado de ganar a algunos de los votantes de Bosak haciendo hincapié en sus puntos de vista compartidos de libre mercado.
Bosak es legislador de la Confederación del partido, que ingresó al parlamento por primera vez el año pasado en un programa que es antiamericano y anti-UE y se opone a los derechos LGBT.
Las posiciones del partido, favorables al mercado, se han ganado el favor de algunos libertarios que se oponen a la fuerte participación de Ley y Justicia en la economía.
Marek Migalski, comentarista y legislador de la UE, escribió en el sitio de noticias derechista Do Rzeczy que espera que los votantes de Bosak sean "neutralizados" en la segunda vuelta. Argumentó que algunos no votarán, algunos respaldarán a Duda y otros votarán "tácticamente" por Trzaskowski para debilitar a Ley y Justicia, que la Confederación considera una fuerza rival conservadora y nacionalista.
Para complicar aún más la apuesta por los votantes de Bosak es que no son un bloque uniforme.
Anna Materska-Sosnowska, politóloga de la Universidad de Varsovia, dijo que el apoyo a Bosak no necesariamente refleja el nivel de apoyo al radicalismo de extrema derecha en Polonia debido a la forma en que Bosak evitó las declaraciones públicas radicales durante la campaña del presidente.
"Se presentó como un caballero bien arreglado y agradable con un traje, que atraía a muchos de esa manera", dijo.
El apoyo de Duda refleja la popularidad que tiene entre muchos polacos mayores y rurales por la combinación de conservadurismo social y generoso gasto social de Ley y Justicia.
"Estoy seguro de que podemos construir aquí una tierra de leche y miel", dijo Duda a los votantes el domingo por la noche en Strzelce, una aldea en el centro de Polonia.
"Un país que también estará a salvo, libre de amenazas terroristas, sin todo lo que a menudo es la ruina de Europa Occidental, un país basado en la tradición, en sus valores probados", dijo Duda.
La comisión electoral estatal de Polonia anunció los resultados de las elecciones el lunes basándose en un recuento de casi el 99.8% de todos los votos.
