Más de 100 personas fueron arrestadas el lunes luego de una noche de vandalismo, saqueos y disturbios que dejó a 13 policías lesionados y que ocasionó daños en la zona de exclusivas tiendas de Magnificent Mile (Magnífica Milla) y otras partes de la ciudad, informaron las autoridades.

El superintendente de la Policía, Dan Brown, dijo que “no fue una protesta organizada”, sino un “incidente de criminalidad pura” que empezó tras el tiroteo de una persona a manos de la policía en el barrio de Englewoood, el día anterior. El lunes se reportaron varios disparos contra la policía y los oficiales respondieron el fuego. Brown dijo que habrá una fuerte presencia policial en la zona central de la ciudad hasta nuevo aviso.

"Esto fue una clara, conducta criminal agravada”, dijo el alcalde de Chicago, Lori Lightfoot. “Esto fue un ataque a la ciudad”.

Los arrestados se esperaba afronten cargos como vandalismo, saqueo, conducta desordenada y agresión contra la policía. Lightfoot dijo que la ciudad ha activado su programa de protección de vecindarios que estará vigente “por muchos días hasta que sepamos que nuestros vecindarios están seguros”.

Ningún oficial fue herido en el tiroteo, dijo el portavoz policial Tom Ahern en Twitter. Muchos de los negocios que fueron saqueados había reabierto recientemente, luego que las protestas por la muerte de George Floyd el 25 de mayo en Minneapolis, devinieron en caos.

Los disturbios estallaron poco después de la medianoche y graffiti antipolicías fue visto en el área de Magnificent Mile, una de las zonas más visitadas por los turistas. Horas antes, docenas de personas se habían enfrentado a la policía luego que policías hirieron a una persona el domingo en el barrio Englewood, a unas 10 millas del lugar.

Brown dijo luego que las personas se dispersaron tras el tiroteo que “estamos monitoreando las redes sociales y hemos encontrado una publicación donde aparece una caravana de autos con personas a quienes se les dice que vayan al centro de la ciudad a saquear”.

A lo largo de Magnificent Mile, se pudo ver a personas que entraban y salían con bolsas llenas de mercancía, así como de bancos, reportó el diario The Chicago Tribune, y mientras la multitud crecía, numerosos autos bajaban a más personas en el área. En las calles de la zona céntrica de la ciudad, bandejas vacías de cajas registradoras yacían tiradas en el suelo y cajeros automáticos fueron abiertos a la fuerza.

Tiendas a varias millas del centro también fueron saqueadas, mientras los estacionamientos quedaron llenos de vidrios y materiales del interior de las tiendas. Ganchos de colgar ropa, y cajas que habían contenido televisores y otros electrónicos fueron vistos, evidencia de que los ladrones habían sacado mercadería de las tiendas.

"Esto obviamente fue muy orquestado”, le dijo el padre Michael Pfleger, un prominente sacerdote católico y activista de la zona sur de la ciudad, a la estación de televisión WBBM, mientras las cámaras mostraban imágenes del centro de la ciudad.

Desde el temprano el lunes hubo una fuerte presencia policial en las afueras de la tienda Apple, en la zona norte del centro de Chicago. A unas cuadras, los estacionamiento de una tienda de electrónicos Best Buy y una licorería estaban llenos de escombros.

Los servicios de trenes y autobuses al centro de la ciudad estaban temporalmente suspendidos por solicitud de los funcionarios de seguridad pública, informó la Autoridad de Tránsito de Chicago. Los puentes que cruzan el Río de Chicago fueron alzados, evitando el tráfico hacia y desde la zona céntrica de la ciudad, las salidas de las autopistas también estaban cerradas en el centro. El acceso se empezó a restablecer el lunes por la mañana.

Sobre el tiroteo en Englewood, la policía informó que recibió un reporte sobre una persona armada a eso de la 2:30 p.m. Respondió y confrontaron a una persona que se asemejaba al sujeto descrito en la llamada. El tipo se dio a la fuga y los policías iniciaron su persecución. El tipo intentó escapar por un callejón y abrió fuego contra los policías.

Los policías respondieron a los disparos e hirieron al sujeto, recuperando el arma. El sujeto fue llevado a un hospital y tres oficiales involucrados fueron llevados a un hospital donde estuvieron bajo observación.

Más de una hora después del tiroteo, un grupo de personas se enfrentó a la policía luego que alguien les dijo que la policía había disparado y herido a un niño. El grupo de personas eventualmente se dispersó.