Un restaurante de la ciudad de Nueva York implementó una iniciativa que pronto podría convertirse en tendencia: exigir que los clientes realicen una prueba rápida de COVID-19 antes de entrar.
Un restaurante de la ciudad de Nueva York implementó una iniciativa que pronto podría convertirse en tendencia: exigir que los clientes realicen una prueba rápida de COVID-19 antes de entrar.