Enlaces para accesibilidad

Grandes corporaciones recelosas de Trump y los republicanos


Goldman Sachs es una de las compañías que se están distanciando del presidente Donald Trump y otros republicanos.
Goldman Sachs es una de las compañías que se están distanciando del presidente Donald Trump y otros republicanos.

Muchos observadores han quedado sorprendidos por la rapidez con que las compañías reaccionaron para suspender sus donaciones a legisladores republicanos después de los hechos en el Capitolio de EE.UU. del 6 de enero de 2021.

Las grandes corporaciones de Estados Unidos han comenzado a distanciarse con rapidez del presidente Donald Trump y sus aliados republicanos, y muchas de las empresas, como Goldman Sachs, Coca-Cola, Ford y Blue Cross Blue Shield, han suspendido las donaciones políticas después del asalto al Capitolio el miércoles pasado por turbas de simpatizantes inspirados por Trump.

Por ahora, las medidas están relacionadas con afirmar el estado de derecho y los resultados de la elección presidencial que llevará al demócrata Joe Biden a la Casa Blanca.

Sin embargo, también indican que las compañías se están sintiendo recelosas de los legisladores que respaldaron los falsos reclamos de fraude electoral de Trump, privando posiblemente a los republicanos del apoyo público de grupos que hasta hace poco fueron el núcleo de la marca política del Partido Republicano.

‘Propagándose como un incendio forestal’

“Esto se está propagando como un incendio forestal”, dijo Jeffrey Sonnenfeld, un profesor de la escuela de administración de la Universidad de Yale que asesora a directores ejecutivos. “La comunidad empresarial de EE.UU. tiene intereses completamente asociados con el público estadounidense y no con el ala autocrática fanática de Trump en el Partido Republicano”.

No obstante, la “pausa” de donaciones anunciada por muchas compañías, entre ellas Marriott, American Express, AT&T, JPMorgan Chase, Dow y otras, probablemente no afecten gravemente a los republicanos en el Congreso que votaron para anular la victoria de Biden.

“Son compromisos simbólicos”, dijo Sheila Krumholz, directora ejecutiva del Centro de Política Receptiva, un grupo no partidista que rastrea el papel del dinero en la política. “Esta es solo una fuente de ingresos y para algunos muy reducida, particularmente en el Senado”.

Los comités de acción política financiados por corporaciones solo pueden aceptar donaciones de hasta 5.000 dólares por candidato cada año. En las contiendas que a veces cuestan a los que ocupan puestos públicos millones de dólares, tales contribuciones resultan apenas una pequeña fracción del panorama de recaudaciones general.

Hasta las elecciones de 2022

En muchos casos, las compañías solo suspenden sus donaciones por varios meses, lo que deja mucho tiempo para acelerar las recaudaciones antes de las elecciones de 2022.

“Se ocultarán hasta que llegue el nuevo ciclo”, dijo Erik Gordon, un profesor de leyes y comercio de la Universidad de Michigan. “Regresarán con sus libretas de cheques y los políticos que ya se preparan para las contiendas legislativas de 2022 están esperando en la puerta trasera”.

Incluso cuando Trump se vendió a los votantes como un gurú multimillonario con un toque de Midas en la economía, muchos líderes empresariales ya se habían alejado silenciosamente de un presidente que limitó el comercio, inflamó el racismo, cortó la inmigración y no pudo detener la pandemia de coronavirus.

El rechazo se aceleró después de los hechos del miércoles en el Capitolio.

Rechazo a la política

Lo que sorprende a muchos observadores es la rapidez con que las compañías reaccionaron para suspender sus donaciones.

“Luce sincero de parte de muchas corporaciones”, dijo Craig Holman, un experto en financiamiento de campañas de Public Citizen, una organización liberal de protección a los consumidores. “No hubo una gran presión pública para que Marriott y otros anunciaran que no harían más contribuciones de campañas. Lo hicieron por su cuenta y sorprendieron a todos en la comunidad de financiamiento de campañas”.

Algunas compañías están tratando de eludir la política completamente después de los sucesos de la semana pasada. Citigroup, por ejemplo, confirmó el domingo que había suspendido todas sus donaciones federales por los tres primeros meses del año, incluso a legisladores demócratas.

Esto no cayó bien a los demócratas, que se quejaron de que estaban siendo penalizados por una violencia que se originó con los republicanos y dejó cinco personas muertas.

“Este no es el momento de culpar a las dos partes”, dijo el representante de Nueva York Sean Maloney a MSNBC. “¿Qué demonios hicieron esta semana los demócratas sino defender la Constitución y el estado de derecho?”

Serie especial de la Voz de América

Síganos en redes sociales

XS
SM
MD
LG