Una intensa jornada de protestas se vivió este jueves en Ciudad de México, encabezadas por los trabajadores del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) en apoyo de los trabajadores de la desaparecida empresa estatal de electricidad, Luz y Fuerza del Centro, los que contaron con el apoyo de otros sindicatos como el Sindicato de Trabajadores de la Universidad Nacional Autónoma de México (STUNAM).
Miles de ex empleados de la compañía eléctrica tomaron parte de la manifestación, informó el gobierno del Distrito Federal, y aunque se registraron algunos enfrentamientos no hubo heridos.
Las autoridades destacaron 10 mil agentes de seguridad, que tuvieron a su cargo el control de la manifestación.
Las movilizaciones se produjeron a un mes de que el Gobierno Federal decretara la desaparición de la empresa estatal Luz y Fuerza del Centro, que proveía de electricidad al centro del país.
"Queremos que se nos respete como sindicato, que se nos respete nuestro contrato colectivo de trabajo", dijo a los periodistas el líder del poderoso Sindicato Mexicano de Electricistas (SME), Martín Esparza.
Los trabajadores expresaron su disconformidad con la medida realizando bloqueos de carreteras y avenidas, cierres simbólicos de dependencias de gobierno y una marcha que concluyó en la plaza del Zócalo, en la capital mexicana. Los trabajadores se concentraron en unos 30 puntos diferentes de la ciudad, para marchar hasta el Zócalo.
Los enfrentamientos fueron aislados. En uno de los casos, los agentes policiales hicieron disparos de advertencia para dispersar a los manifestantes luego de que una decena de trabajadores presuntamente embistiera a ocho elementos de la Policía Federal Preventiva. Los manifestantes fueron detenidos y la Procuraduría General inició una investigación.
El Sindicato que lideró la manifestación convocó a una huelga nacional, a un nuevo pacto social y advirtió que seguirá su lucha en dos frentes, por la vía jurídica y a través de protestas en las calles.
En apoyo de los electricistas acudieron también trabajadores del Sindicato de Telefonistas, así como diputados de los partidos de izquierda que reclamaron la renuncia del Secretario de Trabajo Javier Lozano.
Antes de las manifestaciones, el Presidente Felipe Calderón entregó un premio a Alfredo Elías Ayub, director de la Comisión Federal de Electricidad, el organismo estatal que absorbió las funciones de Luz y Fuerza y reveló intentos de sabotaje para provocar apagones.
Los trabajadores también convocaron a la ciudadanía a evitar consumir energía dos horas por la noche, sin embargo según las autoridades, el consumo eléctrico se desarrollo con normalidad.
De acuerdo con las cifras oficiales brindadas por el gobierno, hasta este miércoles 11 de noviembre, un 54,2 por ciento del total de la plantilla del sindicato, acudió a cobrar su liquidación.