El exdirector del Fondo Monetario Internacional, Rodrigo Rato, fue detenido en España por una investigación de blanqueo de capitales, alzamiento de bienes y fraude fiscal.
Rato, que fue ministro de Economía y vicepresidente entre 1996 y 2004 durante la administración de José María Aznar, negó los cargos en una entrevista con el periódico El País, pero dijo que colaboraría con la justicia.
Luego de que las autoridades registraran su domicilio por más de siete horas e incautaran una cantidad de documentación, Rato fue puesto en libertad el jueves por cooperar con las autoridades.
Rato, quien también fue un destacado miembro del gobernante Partido Popular del presidente del gobierno Mariano Rajoy, ya habría sido interrogado por otras dos sospechas de fraude, una relacionada con la Bolsa de Bankia y otra por el escándalo de las llamadas tarjetas black de Caja Madrid.
"El FMI ya ha pasado por una crisis como esta, especialmente con Dominique Strauss-Kahn que tuvo que renunciar, hace unos años”, explicó el analista Michael Hewson. “Para ser honesto, la credibilidad del Fondo no es tan positiva, de igual manera, ya que ha perdido casi todo sus objetivos con respecto a sus predicciones sobre lo que ha estado sucediendo en Grecia. Yo creo que el problema es más uno político para el señor Rajoy que un problema para el FMI".
Si bien, Rato niega su participación en cualquiera de estos casos, las autoridades decidirán, en base a los documentos incautados, si entablarán un proceso legal en su contra.
