Asemejando la historia que cuenta la canción de "Pedro Navaja" inmortalizada por el panameño Rubén Blades, una prostituta dio muerte de un balazo un hombre que la policía sospecha pueda haber sido un asesino en serie.
El hecho sucedió en Charleston, Virginia Occidental, cuando una mujer, a quien la policía solo ha identificado como Heather, fue atacada por el sospechoso, Neal Falls, y cuando intentaba ahorcarla, ella tomó su pistola del piso y le disparó.
"La vida te da sorpresas... Quien a hierro mata, a hierro termina", dice la letra de Pedro Navaja.
Y así, para sorpresa de las autoridades, en el auto de Falls fueron encontrados hachas, cuchillos, esposas, una pala, cloro y otros objetos. En su bolsillo, la policía también halló una lista de otras 10 mujeres: nueve eran de Virginia Occidental y una estaba en San Diego, California.
Al igual que Heather, todas las mujeres de la lista son prostitutas y continúan vivas.
“Por el hecho de que tuviera 45 años y cargara herramientas como lo hacía, y cometiera un crimen tan organizado y violento, es poco probable que fuera su primer crimen violento", dijo el teniente de policía de Charleston, Steve Cooper.
Charleston es una pequeña ciudad con casinos que es promocionada como una pequeña Las Vegas.