La embajadora de Estados Unidos ante la ONU, Nikki Haley, dijo que la participación de Estados Unidos en los Juegos Olímpicos de Invierno en Corea del Sur, es una “interrogante abierta”, dada la proximidad de su sede —PyeongChang— a la zona desmilitarizada con Corea del Norte.
“Yo creo que esa es una conversación que vamos a tener, pero como siempre digo, nosotros nunca debemos tener miedo de vivir nuestras vidas, de vivir nuestra libertad y es una oportunidad para [que los atletas] hagan lo que se han preparado para hacer. Lo que sí sé que es siempre vemos la manera de proteger a los ciudadanos estadounidenses”, dijo Haley a la presentadora Martha MacCallum, de Fox News.
Las competencias olímpicas se realizarán a solo 50 kilómetros de la DMZ y Haley insistió que todo va a depender de lo que esté pasando en el Norte.
“Tenemos que estar atentos con esto, y esto cambia día a día”, subrayó Haley.
El jueves, dos bombarderos B-1B estadounidenses se sumaron a los ejercicios militares junto a Corea del Sur, en medio de las advertencias de Corea del Norte de que las maniobras y las amenazas de Washington hacen que una guerra nuclear sea un “hecho establecido”.
Las tensiones en la Península Coreana se han incrementado marcadamente en los últimos meses, después de las más recientes pruebas nucleares y de misiles balísticos de Corea del Norte, realizados en desafío de las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU y en medio de la condena internacional.
