El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, viajó a Trinidad y Tobago para la Cumbre de las Américas, en la que participan 34 naciones, donde enfrentará una creciente demanda de cambio de la política estadounidense hacia el gobierno comunista de Cuba.
Obama partió para Puerto
España desde Ciudad de México. En la capital mexicana el presidente Obama dijo
que él no espera que las relaciones entre Estados Unidos y Cuba se descongelen
de la noche a la mañana tras su decisión de aliviar las restricciones de viaje
y de transferencia de dinero por parte de los cubano-estadounidenses.
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con EE.UU.
Por su parte, el
presidente cubano, Raúl Castro, sostuvo que el gobierno de La Habana está
preparado para discutir cualquier tema que Washington quiera, incluyendo
derechos humanos, libertad de expresión y prisioneros políticos. Pero insistió
en que la isla sea tratada con igualdad.
La secretaria de Estado
norteamericana Hillary Clinton dijo que Estados Unidos recibe con agrado la
apertura de Castro y que Washington está analizando muy seriamente el tema y
que considerará como responder.
Muchos líderes latinoamericanos exigen que Obama levante el embargo comercial estadounidense contra Cuba que tiene 47 años. El presidente venezolano, Hugo Chávez, dijo que él y sus aliados votarán contra la declaración final de la cumbre para protestar contra el embargo.