Buena parte del gobierno cerró las puertas en Washington, pero no por otro pleito legislativo sino por una tormenta de nieve que ha dejado hasta ahora entre dos y tres pulgadas de nieve.
Pese a que algunos vuelos fueron retrasados o suspendidos en el aeropuerto Reagan National de la capital, los cierres de oficinas y escuelas quizá hayan sido en vano. La tormenta no produjo los problemas esperados y todo se ha reducido a una nevada de ligera a moderada.
Al final de la mañana las temperaturas ya han subido por encima del punto de congelamiento y debería durar lo suficiente como para que la nieve se derrita un poco antes de regresar a temperaturas bajo cero al final de la noche.
Se espera que el miércoles por la mañana amanezca a unos 10 grados centígrados por debajo de cero y oficinas y escuelas vuelvan a abrir con normalidad.
Pese a que algunos vuelos fueron retrasados o suspendidos en el aeropuerto Reagan National de la capital, los cierres de oficinas y escuelas quizá hayan sido en vano. La tormenta no produjo los problemas esperados y todo se ha reducido a una nevada de ligera a moderada.
Al final de la mañana las temperaturas ya han subido por encima del punto de congelamiento y debería durar lo suficiente como para que la nieve se derrita un poco antes de regresar a temperaturas bajo cero al final de la noche.
Se espera que el miércoles por la mañana amanezca a unos 10 grados centígrados por debajo de cero y oficinas y escuelas vuelvan a abrir con normalidad.