Enlaces para accesibilidad

Francia: Macron insta a la calma y policía se prepara para más protestas


Soldados patrullan el Arco de Triunfo en París el viernes, anticipando un quinto fin de semana consecutivo de violentas protestas.
Soldados patrullan el Arco de Triunfo en París el viernes, anticipando un quinto fin de semana consecutivo de violentas protestas.

Anticipándose a un quinto fin de semana de violentas protestas, el presidente de Francia pidió calma el viernes y el jefe de la policía de París advirtió que se desplegarán, de nuevo, vehículos blindados y miles de oficiales en la capital francesa.

El jefe de la policía, Michel Delpuech, dijo a la radio RTL que los servicios de seguridad tienen la intención de desplegarse el sábado, en el mismo número que el fin de semana pasado, con unos 8.000 oficiales y 14 vehículos blindados protegiendo las calles de París, durante una protesta antigubernamental planeada por el movimiento del chaleco amarillo.

Delpuech señaló que la mayor diferencia será el despliegue de más grupos de oficiales de patrulla para atrapar a los vándalos, quienes el fin de semana pasado recorrieron las calles alrededor de los elegantes Campos Elíseos, saqueando y causando daños. La policía arrestó a más de 1.000 personas en París, el fin de semana pasado, y 135 personas resultaron heridas, entre ellas, 17 policías.

El ministro del Interior francés, Christopher Castaner, también instó a los manifestantes a expresarse pacíficamente, después de que, el jueves, un tiroteo de la policía terminó con una persecución, de dos días, de un hombre sospechoso de matar a cuatro personas, cerca de un mercado navideño en la ciudad oriental de Estrasburgo. Cientos de policías fueron movilizados en la búsqueda, que terminó con el asesinato del sospechoso.

Un manifestante sostiene una pancarta que dice "Todos juntos, pónganse sus chalecos amarillos y vengan", en Biarritz, suroeste de Francia.
Un manifestante sostiene una pancarta que dice "Todos juntos, pónganse sus chalecos amarillos y vengan", en Biarritz, suroeste de Francia.

"No puedo soportar la idea de que hoy la gente aplauda a las fuerzas policiales y que mañana alguna gente pensará que tiene sentido lanzarnos piedras", dijo Castañer, desde Estrasburgo.

Un sexto manifestante de "chaleco amarillo" fue asesinado esta semana, al ser golpeado por un camión en una barricada de protesta. A pesar de los llamados de las autoridades -que instan a los manifestantes, que usan los chalecos de seguridad fluorescentes que Francia exige a los conductores que tengan-, para detener sus manifestaciones de violencia, el movimiento que ha sacudido el país desde mediados de noviembre no ha mostrado señales de disminuir las manifestaciones.

"La semana pasada, manejamos los chalecos amarillos, pero también fuimos testigos de escenas de rupturas y saqueos por parte de delincuentes", dijo Delpuech. "Nuestro objetivo será controlar mejor este aspecto".

Las protestas comenzaron el 17 de noviembre contra el aumento de los impuestos a la gasolina, pero se han transformado en una expresión de ira contra los altos impuestos de Francia y en la sensación de que el gobierno del presidente Emmanuel Macron no se preocupa por los trabajadores franceses.

Los manifestantes marchan en la famosa avenida Campos Elíseos, en París, Francia, mientras protestan por el alza de los precios del combustible el 24 de noviembre de 2018.
Los manifestantes marchan en la famosa avenida Campos Elíseos, en París, Francia, mientras protestan por el alza de los precios del combustible el 24 de noviembre de 2018.

Macron ha reconocido que es parcialmente responsable de la ira y ha anunciado una serie de medidas destinadas a mejorar el poder adquisitivo de los trabajadores franceses, pero se ha negado a restablecer un impuesto a la riqueza que se levantó para estimular la inversión en Francia.

El viernes, Macron pidió calma y orden antes de otro fin de semana de protestas.

"No creo que nuestra democracia pueda aceptar" la "ocupación del dominio público y los elementos de violencia", dijo Macron en Bruselas, hablando después de asistir a una cumbre de la Unión Europea.

“Nuestro país necesita calma. Necesita orden. Necesita funcionar normalmente de nuevo", dijo Macron.

Insistió en que había escuchado las preocupaciones de los manifestantes y defendió sus promesas de acelerar el alivio fiscal. También rechazó los pedidos de su renuncia, que ahora se encuentra entre las demandas dispares de los manifestantes.

Algunos sindicatos ahora están pidiendo huelgas continuas en todo el país.

"La mejor acción es ir a la huelga", dijo Philippe Martínez, jefe del sindicato de izquierda CGT. "Hay desigualdades en este país y tenemos que hacer que los jefes de grandes compañías paguen".

Un grupo de chalecos amarillos instó a una protesta no violenta en la Plaza de la República en París bajo el lema “Je Suis Strasbourg” (“Soy Estrasburgo”) para mostrar solidaridad con los muertos y heridos en Estrasburgo el martes por la noche.

Eso se refiere al lema "Je Suis Charlie" utilizado por los partidarios de la libertad de expresión, después de un ataque, en 2015, en el que 12 personas murieron en el semanario satírico francés Charlie Hebdo.

Una cuarta persona murió el viernes por las heridas sufridas en un ataque en el mercado navideño en Estrasburgo, mientras los investigadores trabajaban para determinar si el principal sospechoso obtenía ayuda mientras huía.

El fiscal de París, Remy Heitz, quien maneja casos de terrorismo en toda Francia, dijo en una conferencia de prensa que siete personas están bajo custodia policial por el ataque de Estrasburgo, incluidos cuatro familiares del sospechoso Cherif Chekatt.

Chekatt, de 29 años, fue asesinado a tiros el jueves, durante una operación policial.

"Queremos reconstruir las últimas 48 horas para averiguar si obtuvo algún apoyo", dijo Heitz.

XS
SM
MD
LG