Otro ataque con cuchillo a un soldado israelí en la zona de Hebrón y el incendio de un lugar sagrado judío en la ciudad palestina de Nablus rompió la relativa calma de las últimas 24 horas en el conflicto entre Israel y Palestina.
En el acuchillamiento, un joven palestino logró herir al soldado antes de caer abatido por las balas. El palestino llevaba un chaleco de prensa, según se puede ver en imágenes de video transmitidos por la televisión de Hamas.
Del lado Palestino, una turba de palestinos lanzaron bombas molotov a la tumba del patriarca José, un sitio venerado por los judíos, situado en la Margen Occidental.
Las fuerzas de seguridad palestinas consiguieron apagar el incendio y dispersar a los atacantes encapuchados que habían irrumpido en el recinto que quedó seriamente dañado.
Palestinos e israelíes suelen coordinar la entrada de fieles judíos para rezar en el lugar, pero la seguridad está a cargo de la Autoridad Palestina.
Mientras tanto, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, confirmó las gestiones para una inminente cumbre a realizarse en Jordania en la que participarían líderes árabes, palestinos y el secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry.
"Hay una propuesta para reunirse quizá en Jordania. Estoy dispuesto a reunirme con líderes árabes y palestinos si esto ayuda a calmar los ánimos. Lo que los palestinos deben hacer antes es cesar la salvaje campaña de mentiras e incitación a la violencia. No se puede promover la paz y al mismo tiempo alentar la ola de terror. Todos debemos unirnos para reducir la tensión", dijo Netanyahu en una rueda de prensa.
