Un ataque suicida dejó 13 muertos en un área mayormente chiita de la capital de Iraq, informó la policía.
La explosión en la sección de Kadhamiya en Bagdad también dejó otros 30 heridos.
El área alberga capillas sagradas chiitas.
Ningún grupo se ha adjudicado la responsabilidad inmediata por el ataque, pero dichos actos frecuentemente son atribuidos a militantes sunitas.
Mientras otro artefacto explosivo dejó al menos dos muertos afectó el barrio norteño de Husseinya.
El mortal incidente sigue a una serie de explosiones ocurridas el domingo con un saldo de 37 muertos.
Iraq ha visto un dramático resurgimiento de la violencia desde el 2013, cuando cerca de nueve mil civiles y efectivos de las fuerzas de seguridad iraquíes resultaron muertos, según la ONU.
El año pasado fue uno de los peores, con unas 15.500 víctimas fatales.
Las muertes no declinaron en enero, con la ONU reportando 1.570 muertos.
Las cifras incluyen a 585 miembros del ejército iraquí.
