El Fondo Monetario Internacional anunció, el martes, que disminuyó su pronóstico de crecimiento para Estados Unidos este año, y la decisión proyecta sobra sobre el pronóstico de desempeño entre las economías más avanzadas del mundo.
El FMI anticipa que la producción de Estados Unidos se expanda en apenas 1,6%, más de medio punto porcentual menos de lo pronosticado en julio.
Se trata de la mayor declinación para una nación desarrollada y es ocasionada por una inesperada débil inversión empresarial y escasos inventarios.
En general, el FMI predice que las economías avanzadas, que incluyen a Europa, el Reino Unido, Japón y Canadá, crecerán un 1,6%, una baja del 0,2% con respecto al más reciente estimado del organismo.
Sin embargo, un crecimiento más lento en las naciones desarrolladas está siendo contrarrestado por mejoras levemente más rápidas en las economías emergentes, dijo el FMI. El crecimiento supera su pronóstico para esos países en 0,1% a 4,2%. Eso fue suficiente para sostener el estimado de crecimiento global del FMI en 3,1% este año.
El FMI señaló la decisión del Reino Unido de salirse de la Unión Europea como un ejemplo del creciente sentimiento contra la globalización que arriesga socavar el comercio internacional y la inversión, un factor clave que ha impulsado la economía mundial durante décadas.
