Una huelga en el servicio de trenes de pasajeros en Filadelfia terminó el sábado con la intervención del presidente Barack Obama a petición del gobernador del estado.
La huelga había sido convocada el viernes por el sindicato de ingenieros y electricistas que no pudo llegar a un acuerdo sobre los contratos con la patronal.
El sábado, el presidente Obama aceptó la petición del gobernador del estado de Pensilvania, Tom Corbett, de crear una junta de tres miembros que medie en la disputa.
Obama ha dado 30 días para presentar recomendaciones sobre cómo resolver la disputa de manera definitiva.
El domingo por la mañana los trenes corrieron como de costumbre y todos los trabajadores se presentaron a trabajar. El primer tren en salir fue el de 4:18 de Temple Station hacia el aeropuerto internacional de Filadelfia.
La huelga había sido convocada el viernes por el sindicato de ingenieros y electricistas que no pudo llegar a un acuerdo sobre los contratos con la patronal.
El sábado, el presidente Obama aceptó la petición del gobernador del estado de Pensilvania, Tom Corbett, de crear una junta de tres miembros que medie en la disputa.
Obama ha dado 30 días para presentar recomendaciones sobre cómo resolver la disputa de manera definitiva.
El domingo por la mañana los trenes corrieron como de costumbre y todos los trabajadores se presentaron a trabajar. El primer tren en salir fue el de 4:18 de Temple Station hacia el aeropuerto internacional de Filadelfia.