El alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, planea prohibir el uso de envases de poliestireno por restaurantes con el fin de prevenir contaminación.
La medida ocurre después de que las autoridades neoyorquinas dieron un año a las manufacturadoras de este material para que probaran que el material podía ser reciclado.
Según reportes de prensa, las empresas no pudieron cumplir, por lo que la prohibición entraría en efecto el 1 de julio.
Los envases de este material, usados ampliamente en todo Estados Unidos por restaurantes para envasar comida para llevar, contaminan principalmente las vías acuáticas, según activistas medioambientales.
La administración dijo que las virutas de poliestireno, que se utilizan para embalaje, también serán prohibidas, pero podrán ser usadas para el transporte de carga desde otras ciudades hacia Nueva York.
Los restaurantes que registren ventas de menos de 500 mil dólares anuales pueden ser elegibles a exenciones, pero deben demostrar que usar otro material sería más caro.
La administración de De Blasio agregó que habrá una marcha blanca hasta enero del próximo año, donde no se aplicaran multas.
