La tormenta, la segunda de la temporada de huracanes en el Atlántico—que oficialmente no comienza hasta el 1ro. de junio—,se ubicaba esta mañana a unos 10 kilómetros al oeste de Willmington, pegado a la costa de Carolina del Norte, con vientos máximos sostenidos de 55 kilómetros por hora.
De acuerdo con el último parte del CNH, "se espera un movimiento continuo este-noreste con un aumento adicional de la velocidad durante el próximo día". Su velocidad de traslación es alta, unos 30 kilómetros por hora.
Beryl se formó el viernes pasado en el Atlántico frente a Carolina del Sur, y durante el fin de semana azotó con lluvias y con vientos de hasta 65 kilómetros por hora el sur de Georgia y el norte de Florida, donde derribó árboles y líneas del tendido eléctrico en el área de Jacksonville.
La agencia federal de EE.UU. para el estudio del océano y la atmósfera (NOAA, por sus siglas en inglés) ha pronosticado que las probabilidades este año apuntan a que la temporada de huracanes en el Atlántico sea casi normal, aunque ya se han desarrollado dos tormentas tempranas.
La primera, Alberto, también se formó frente a la costa de Carolina del Sur, el pasado 19 de mayo, con vientos máximos sostenidos de cerca de 75 kilómetros por hora.