El lunes aparecieron los cuerpos de los tres jóvenes israelíes desaparecidos el 12 de junio y el martes se reportó el asesinato de un joven palestino.
A raíz de estos acotecimientos, el portavoz de la Casa Blanca Josh Earnest urgió a los gobiernos de Israel y Palestina a prevenir la atmósfera de venganza y represalias.
"Las personas que llevan a cabo actos de venganza sólo van a desestabilizar una situación ya volátil y emocional.
La asesora de seguridad nacional de la Casa Blanca, Susan Rice, y el secretario de Estado, John Kerry, también condenaron el "secuestro y asesinato despreciable y sin sentido" del joven de 16 años, cuyo cuerpo calcinado fue hallado por la policía israelí en el Bosque de Jerusalén, en la parte oeste de la ciudad.
El presidente de Israel, Benjamin Netanyahu, también se pronunció sobre los hechos y pidió a los ciudadanos de Israel que no tomen la justicia por su cuenta.