Enlaces para accesibilidad

Los recuerdos del 9/11


En la ciudad de Nacogdoches, en Texas, algunos de los 30.000 habitantes compartieron sus recuerdos de los atentados del 11 de septiembre con la Voz de América.

Nueva York, Washington y Filadelfia experimentaron el mayor impacto de los ataques terroristas en Estados Unidos el 11 de septiembre de 2001. Pero en un mundo unido por las comunicaciones, los estadounidenses en pequeñas ciudades y zonas rurales también sintieron rabia y dolor.

Cindy Grayson, cantautora y empleada de una tienda en Nacogdoches, dice que le gusta estar lejos del estrés de las grandes ciudades. Sigue las noticias, pero las guerras y los conflictos le son más lejanos.


“Uno siente en parte que eso ocurre muy lejos, que todavía está más allá, porque estamos tan…no sé, es un mundo completamente diferente aquí en Nacogdoches”, dice.


Pero los ataques terroristas de 2001 le hicieron caer en la cuenta de que terribles sucesos también podían ocurrir cerca de su casa. Y cuando el transbordador espacial Columbia se desintegró sobre el este de Texas en 2003 y escombros cayeron sobre la ciudad y en su propiedad, Grayson pensó en un principio que se trataba de un ataque terrorista.


“Con la casa temblando y todo, mi primera reacción fue pensar que habían estallado algo en Dallas o que había impactado a Houston y que estábamos sintiendo las vibraciones de ese ataque”, recuerda.


Muchos de los 30.000 ciudadanos de Nacogdoches se sintieron conectados con la guerra de Estados Unidos contra el terrorismo.


Carolyn Adams tiene dos hijos en las Fuerzas Armadas. Ella cree que las operaciones estadounidenses en Afganistán y la muerte de Osama bin-Laden en Pakistán han reducido la amenaza terrorista. Osama “tiene seguidores, sabemos eso, pero creo que librarnos de él ha ayudado”, sostiene.


El médico jubilado Gregory Carroll lamenta todas las muertes y el sufrimiento ocasionado por las guerras y se pregunta si realmente han protegido a su nación. “Todavía me preocupa que suceda de nuevo. No estoy seguro de que estemos más seguros”, considera.


Una de las personas a cargo de mantener a salvo a la gente de Nacogdoches es el sargento de la policía Gregory Sowell. El sargento dice que Nacogdoches está mejor protegido que nunca debido a las subvenciones financieras que recibieron del Departamento de Seguridad Nacional.


“Tenemos más equipamientos ahora de lo que jamás soñamos que tendríamos, equipos sofisticados para una ciudad de este tamaño, y nosotros buscamos activamente recibir estos subsidios”, asegura.


Sowell dice que los subsidios federales ayudan a las ciudades en el este de Texas a trabajar juntas en una red de emergencia para que respondan a cualquier tipo de desastre. “Estos planes y recursos fueron utilizados en Nacogdoches, Texas, durante los huracanas Rita e Ike”.


Por lo general, la vida es calma y fácil en la ciudad. Incluso el impacto emocional de aquel terrible día hace 10 años ha disminuido, dice Archie McDonald, profesor de historia en la universidad Stephen F. Austin University en Nacogdoches.


“Probablemente la mayoría de las personas, si no se pusieran a hacer las matemáticas, no podrían decirte automáticamente si fueron nueve, 12 (años) o lo que sea”, dice McDonald. “Pero cuando nos acerquemos a la fecha se van a centrar más y habrá algún tipo de ceremonia en la comunidad”.


McDonald cree que el 11 de septiembre eventualmente será como otras fechas históricas que los estadounidenses celebran de manera más informal y casual, como el Día de la Independencia: “Ahora solamente tenemos una fiesta el 4 de julio. No recordamos el hecho de que mucha gente murió por lo que ocurrió hace 235 años”.


Así que a medida que se acerca el aniversario de los 10 años de los ataques terroristas en Estados Unidos, las personas aquí continúan con la esperanza de que su comunidad y su país siguen a salvos.

XS
SM
MD
LG