Los trastornos de aprendizaje de la escritura son tan frecuentes como los de la lectura y parecen afectar más a los varones que a las mujeres.
La disgrafía es el trastorno del aprendizaje de la escritura e incluye problemas para escribir, deletrear y organizar las idean sobre un papel.
Se diagnostica cuando las habilidades de escritura de un niño disminuyen por debajo del nivel normal para su edad y coeficiente intelectual (CI).
Entre el 7 y el 15% de más de 5.700 alumnos estudiados desarrolló un trastorno de la escritura durante su escolaridad, según un nuevo estudio del equipo de la doctora Slavica K. Katusic, de la Clínica Mayo, en Rochester, Minnesota, que fue publicado por la revista Pediatrics.
Los varones eran entre dos y tres veces más propensos a recibir el diagnóstico, independientemente del criterio utilizado, dijeron los autores del estudio.
Los trastornos de escritura son por lo menos tan frecuentes como los de lectura, según los resultados.
La mayoría de los niños con un problema de escritura diagnosticado tenía también alguna discapacidad de lectura, y sólo un cuarto de ellos tenía dificultades sólo con la escritura.
Estudios previos habían demostrado que las niñas generalmente superaban a los varones en escritura manual y en expresión escrita, explicó el equipo.
Se necesitan más estudios para comprender esa diferencia de género y si en ella influye la predisposición genética y los factores ambientales, agregaron los autores.
La evaluación de los problemas de escritura y aprendizaje se puede realizar en la escuela y si se diagnostica un trastorno, los niños pueden recibir servicios educativos gratuitos para manejar el trastorno.