El alcance de las entregas de ayuda internacional a las Filipinas se amplió este lunes, cuando helicópteros militares de Estados Unidos llevaron alimentos, agua y otras provisiones a comunidades en islas y montañas remotas afectadas por el tifón Haiyan.
El portaviones USS George Washington funciona como el centro de las operaciones de ayuda, enviando suministros para su distribución y llevando ayuda y medicamentos a cientos de víctimas.
En el terreno, hay signos de que las devastadas comunidades han comenzado a recuperarse y algunos mercados y estaciones de gasolina abrieron al público por primera vez desde el paso del tifón.
La gente también ha comenzado a reparar las casas dañadas o a construir refugios temporales con los escombros.
El gobierno de Estados Unidos ha anunciado la ampliación de la ayuda en $10 millones de dólares, con lo que su aporte hasta ahora alcanza los $37 millones de dólares.
El presidente filipino Benigno Aquino ha prometido permanecer en el área central más golpeada por el tifón hasta sentirse satisfecho con los esfuerzos para ayudar a los sobrevivientes de la devastadora tormenta que golpeó las islas el 8 de noviembre.
El gobierno de las Filipinas dice que al menos 3.974 personas murieron a consecuencia del tifón y otras 1.200 aún permanecen desaparecidas.
El portaviones USS George Washington funciona como el centro de las operaciones de ayuda, enviando suministros para su distribución y llevando ayuda y medicamentos a cientos de víctimas.
En el terreno, hay signos de que las devastadas comunidades han comenzado a recuperarse y algunos mercados y estaciones de gasolina abrieron al público por primera vez desde el paso del tifón.
La gente también ha comenzado a reparar las casas dañadas o a construir refugios temporales con los escombros.
El gobierno de Estados Unidos ha anunciado la ampliación de la ayuda en $10 millones de dólares, con lo que su aporte hasta ahora alcanza los $37 millones de dólares.
El presidente filipino Benigno Aquino ha prometido permanecer en el área central más golpeada por el tifón hasta sentirse satisfecho con los esfuerzos para ayudar a los sobrevivientes de la devastadora tormenta que golpeó las islas el 8 de noviembre.
El gobierno de las Filipinas dice que al menos 3.974 personas murieron a consecuencia del tifón y otras 1.200 aún permanecen desaparecidas.