Las autoridades de aviación colombianas informan que una investigación preliminar ha revelado que el avión de LaMia que se estrelló cuando trataba de aterrizar en el aeropuerto de Medellín, se quedó sin combustible en el aire.
Un comunicado de la agencia de Aerocivil dice que la conclusión está basada en la información recuperada de las cajas negras de la nave y otra evidencia.
El secretario de Seguridad Aérea de Aerocivil, coronel Freddy Bonilla, dijo que: "Los miembros de la tripulación eran conscientes de la limitación de combustible y de que no era el adecuado que se necesitaba para llegar a Ríonegro".
No obstante, dijo, no informaron en ningún momento de esa situación al control aéreo. Tampoco se declararon en emergencia sino siete minutos antes del accidente. Poco antes habían solicitado prioridad para aterrizar, petición que fue concedida por la torre de control de Ríonegro.
Pese a la crítica situación, el piloto tampoco reportó que se le estaban apagando paulatinamente cada uno de los motores de la nave. Por el contrario continuó las maniobras de aterrizaje "de forma normal", aseguró Bonilla, y solo dos minutos antes de la caída, reportó la "falla total eléctrica".
El copiloto insistió en la cabina de forma reiterada que estaban al límite de combustible para llegar a su destino y aunque en las grabaciones de la caja negra, la tripulación contempló aterrizar en Leticia o Bogotá para reabastecer, decidió seguir a Ríonegro, indica la investigación.
Otras irregularidades del fatídico vuelo reveladas por las autoridades colombianas son:
La aeronave no estaba certificada para realizar un viaje con las características que presentó en el plan de vuelo.
Las autoridades bolivianas autorizaron el itinerario con las consecuencias trágicas que ya se conocen.
El avión llevaba más peso del permitido por reglamentación.
La aeronave, un British Aeroespace 146 operado por la compañía de alquiler de vuelos boliviana LaMia, se estrelló el 28 de noviembre cuando llevaba un equipo de fútbol brasileño a jugar en Medellín.
De las 77 personas a bordo, solo seis sobrevivieron.
