“Me gustaría pedir a todos los estadounidenses que recuerden lo que las familias de nuestros militares a menudo experimentan durante esta época del año. Recordemos todos los sacrificios que hacen para servir con orgullo a todos nosotros”, dijo la esposa del presidente Barack Obama.
Michelle Obama explicó que en ocasiones piensa en los miles de hombres y mujeres uniformados que sirven en el extranjero y que se despiertan a media noche en algún lugar remoto del mundo para leer una historia especial a sus hijos a través de Skype, o “para a través de la pantalla ver cómo sus hijos abren los regalos de Santa Claus”.
“Luego estas familias de militares, esposa y esposos, pasan horas llenando cuidadosamente paquetes relativos a las fiestas para sus seres queridos uniformados, enviándolos árboles de Navidad en miniatura, haciendo galletas de Navidad, haciendo todo lo posible para ayudarles a experimentar la magia de las fiestas dondequiera que se encuentren”, enfatizó la primera dama.
Según Michelle, una encuesta reciente muestra que el 81 por ciento de las familias de militares activos participaron de programas para voluntarios durante el año pasado.
Una cifra superior al 27 por ciento del resto de la población en general que participa de este tipo de actividades.