Ricardo Augusto Utuy, un guatemalteco de 34 años de edad, mató sin razón a una bebé de tres años al propinarle múltiples puñaladas en una fábrica de textiles en Los Angeles, California.
El sujeto atacó a la pequeña sin razón alguna en la fábrica de ropa donde trabajaba con la madre de la niña.
La madre de la menor explicó a las autoridades que su hija había ido a entregarle a su papá una galleta cuando la vio corriendo hacia ella y Utuy la seguía de cerca.
Presuntamente, el sospechoso apuñaló en varias ocasiones a la menor quien fue trasladada en un vehículo privado hasta encontrarse con una ambulancia para llegar a un hospital, donde fue declarada sin vida.
Según los compañeros de trabajo el asesino hablaba solo y no se relacionaba con nadie en el trabajo.
La policía de Los Angeles logró capturarlo luego de una persecución y fue puesto en custodia.
La víctima acababa de ser recogida de una guardería por su madre.