Los candidatos presidenciales de Estados Unidos, John McCain y Barack Obama, realizan los preparativos finales para su segundo debate, que tendrá lugar este martes en Nashville, Tennessee, tras intensificar sus ataques verbales entre sí.
En un acto frente a estudiantes, en Alburquerque, Nuevo México, el lunes, McCain acusó a Obama de aceptar dinero para la campaña de las fracasadas compañías de préstamos hipotecarios Fannie Mae y Freddie Mac, mientras ignoraba el inminente colapso.
La campaña de Obama presentó un aviso publicitario sobre el rol de McCain en el escándalo financiero de la década de 1980.
McCain era parte de un grupo de legisladores que intervino con reguladores a favor de Charles Keating, director de una institución de ahorros y préstamo que colapsó a fines de los años 80.
Posteriormente Keating fue declarado culpable de fraude financiero.
Con una crisis económica mundial en el horizonte, los temas financieros probablemente estarán al tope de la agenda para el debate entre McCain y Obama.
Será su segundo debate, el cual se realizará en el formato de cabildo abierto, donde los votantes tendrán la oportunidad de hacer preguntas.