Las autoridades en Yemen arrestaron a por lo menos 25 personas con presuntos vínculos con al-Qaeda en conexión con el ataque del miércoles a la embajada de Estados Unidos en Sanna, la capital yemení.
En el ataque murieron seis soldados yemeníes y cuatro transeúntes, incluyendo una mujer estadounidense de 18 años y un yemení con quien ella se había casado recientemente.
Seis atacantes también perecieron.
Las autoridades dicen que los militantes usaron coches bomba, granadas y armas automáticas en el ataque.
Guardías yemeníes y la policía contraatacaron, impidiendo que los agresores ingresaran a los terrenos de la embajada.
El presidente George W. Bush dijo que el ataque es un recordatorio de que Estados Unidos está en guerra con los extremistas ideológicos.
El Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas y el secretario general Ban Ki-moon también condenaron el ataque a la embajada y pidieron que los perpetradores sean llevados ante la justicia.