Un juez italiano resolvió que el primer ministro Silvio Berlusconi puede ser llamado a testificar en el juicio sobre agentes de inteligencia estadounidenses e italianos, acusados de secuestrar a un islamista en Milán, y de haberlo trasladado a Egipto para su interrogatorio.
Berlusconi, quien asumió el cargo la semana pasada, no está acusado de ningún crimen.
Pero la determinación judicial es que podría ser llamado a testificar sobre secretos de Estado en el caso.
La resolución también permite a los abogados de la defensa llamar al ex primer ministro Romano Prodi y a otras autoridades de otros gobiernos a testificar.
Los acusados, incluyendo operativos de la CIA, de Estados Unidos y el ex jefe del servicio de inteligencia italiano, general Nicolo Pollari, están acusados de haber secuestrado a un imán egipcio de Milán, en 2003, y de haberlo trasladado a Egipto.
El imán dice que en ese país, fue encarcelado, interrogado y torturado. Aún no se ha fijado fecha para el testimonio.
Veintiséis estadounidenses están siendo sometidos a juicio en ausencia.