El Departamento de Defensa de Estados Unidos informó que está planificando derribar un satélite espía averiado que, se espera, ingrese a la atmósfera terrestre el mes próximo.
En una conferencia de prensa, el jueves, el vice consejero de Seguridad Nacional, James Jeffries, expresó que un buque de guerra disparará un misil contra el satélite, poco antes de que reingrese a la atmósfera.
El funcionario señaló que el presidente Bush aprobó la misión.
Jeffries no suministró la fecha exacta para el lanzamiento del misil, pero indicó que el satélite contiene combustible tóxico para cohetes que podría ser dañino para personas que se acerquen o tengan contacto por cierto tiempo con el material.
El general James Cartwright, del comando conjunto de las Fuerzas Armadas, dijo que si el misil no da en el blanco, que sería el satélite, un segundo objetivo sería alcanzar el tanque de combustible para minimizar la cantidad de ese liquido que regrese a Tierra.