Por decimosexto año consecutivo, la Asamblea General de las Naciones Unidas aprobó una resolución que insta a Estados Unidos a levantar su embargo comercial contra Cuba.
La resolución, no obligatoria, fue aprobada el martes, por 184 votos contra cuatro, con una abstención.
Cuba califica el embargo, impuesto hace cuatro décadas, como un genocidio que ha costado a la isla más de 86 mil millones de dólares.
El canciller cubano, Felipe Pérez Roque, lo describe como una violación flagrante masiva y sistemática de los derechos de los cubanos.
El asesor del Departamento de Estado para Asuntos Latinoamericanos, Ronald Godard, dice que las penurias de Cuba se deben a las propias políticas de la isla.
La semana pasada, el presidente Bush dijo que la medida continuaría mientras el régimen de La Habana mantenga su monopolio sobre la vida política y económica de los cubanos.
El mandatario también instó a la comunidad internacional a apoyar lo que calificó como el movimiento democrático que está naciendo en Cuba, y a ayudar a la nación a convertirse en una sociedad libre.