China desaprobó enérgicamente el encuentro entre el primer ministro de Canadá, Stephen Harper, y el exiliado líder espiritual del Tibet, Dalai Lama.
El vocero del ministerio del Exterior chino, Liu Jianchao, dijo, este martes, que la reunión fue una abierta interferencia en los asuntos internos de China y que socavó gravemente las relaciones entre China y Canadá.
El encuentro tuvo lugar en la oficina de Harper, en Ottawa, el lunes.
China había advertido a Canadá previamente que las conversaciones podrían afectar las relaciones entre ambos países.
Beijing hizo la misma amenaza previamente, este mes, cuando el presidente George Bush y líderes del Congreso honraron al Dalai Lama, aquí en Washington, con la máxima condecoración civil de Estados Unidos.
Beijing se ha opuesto consistentemente a los intentos del Dalai Lama a reunirse con los líderes mundiales, acusándolo de promover secretamente la independencia del Tibet.
El Dalai Lama rechaza los cargos, señalando que sólo quiere autonomía para la región.