La región central de Estados Unidos está literalmente con agua hasta el cuello.
En estados como Ohio, los equipos de rescate tratan de poner a salvo a decenas de personas atrapadas en sus viviendas totalmente inundadas.
Las experiencias son traumáticas para muchos residentes como Bob Vigliotti, quien su novia fue arrastrada por la corriente. "La corriente es fuerte, mi novia fue arrastrada. Intentamos agarrarla y terminó lejos, cerca de un aviso de sodas. Buscamos la forma de agarrarla y terminamos todos atrapados”, explicó este residente.
Vigliotti y su novia fueron mas tarde rescatados. “Si no fuera por unas personas en un bote que llegaron a rescatarnos, estaríamos allí todo el día", concluyó.
El estado es tal, que en Ohio, se ordenó evacuar a 130 presos de una cárcel.
La situación es similar en otros estados como Wisconsin y Minesota.
El ambiente es desolador. Cientos de viviendas y negocios han resultado dañados y muchos de ellos siguen estando inaccesibles para sus propietarios.
Se calcula que más de medio millón de personas han tenido que abandonar sus casas debido a las inundaciones.
Residentes de áreas inundadas como Carl Anderson aseguran que estas inundaciones son históricas.
"Hemos vivido aquí por mas de 10 años y nunca se dieron este tipo de inundaciones, nosotros nunca tuvimos inundaciones en el sótano de nuestra casa", dijo Anderson. En Ohio se declaró estado de emergencia.
En Minesota, la Cruz Roja identificó 4.200 casas afectadas, de las cuales 256 están totalmente destruidas.
En Wisconsin, las tormentas destruyeron 30 viviendas particulares y 25 negocios. Otras 731 casas y 32 locales comerciales sufrieron daños.
Las autoridades locales mantienen hoy las alertas por inundaciones en algunas zonas de otros estados, como Nebraska, Dakota del Sur, Colorado, Indiana, Illinois y Missouri, así como Texas y Oklahoma.